Cómo tu cuerpo moldea tu estado de ánimo
En Programación Neurolingüística (PNL) existe un principio fundamental: la mente y el cuerpo son un sistema integrado. Lo que piensas afecta cómo te mueves y respiras, pero también ocurre lo contrario: tu fisiología puede transformar tu estado emocional en segundos.
Tony Robbins, uno de los principales difusores de esta idea, lo explica con una frase contundente: “El movimiento crea emoción”. No se trata de una metáfora, sino de un principio práctico.
Piensa en esto:
- Cuando te sientes triste o derrotado, tu cuerpo lo refleja con hombros caídos, respiración corta y mirada hacia abajo.
- Pero si en ese mismo instante cambias tu postura, levantas el pecho, sonríes de forma deliberada y respiras profundamente, tu cerebro recibe un mensaje distinto y comienza a generar un cambio químico real en tu estado de ánimo.
La PNL enseña que puedes “anclar” emociones positivas usando tu fisiología como un interruptor. Robbins lo lleva a la práctica en sus eventos masivos, donde hace que la gente salte, grite, aplauda y se mueva de formas expansivas. La razón es simple: al elevar la energía física, se despiertan estados internos de poder, motivación y confianza.
La ciencia también respalda esto: adoptar posturas abiertas, respirar profundamente y moverte con decisión activa el sistema nervioso parasimpático, libera endorfinas y reduce la sensación de estrés.
En conclusión, no necesitas esperar a sentirte motivado para actuar. Actúa primero con tu cuerpo y tu fisiología creará el estado mental que necesitas. Como diría Robbins: “No es la emoción la que genera la acción, es la acción la que genera la emoción”.